jueves, 13 de agosto de 2009

Woodstock 1969. Puueess ssi....pero ¡No!

O tal vez, quién sabe. El hecho es que entre estos 15 y 17 de agosto los nostálgicos del planeta desempolvarán los recuerdos de su traviesa (algunos dirán "rebelde") etapa de juventud, cuando muchos de ellos decidieron dejarse crecer el cabello, esgrimir un símbolo de Peace and love, reivindicar el derecho a hacer lo que se les diera la gana con su cuerpo, su tiempo y su existencia, explorar otros estados de conciencia y tomar la música como un ariete que si no derribaba, por lo menos golpearía algunas de las más marcadas tradiciones del statu quo como el adocenamiento, la pasividad y la falta de trascencencia en el protagonismo social de la juventud. Tiempo y lugar específicos para el uso de ese instrumento fueron los dias 15,16 y 17 de agosto de 1969 en la granja de Max Yasgur localizada en Sullivan County (Nueva York), ante la negativa del pueblo de Woodstock (en Ulster County). Ese 15 de agosto, a las 5 y 8 minutos de la tarde, después de un sencillo ritual del guía espiritual Swami Satchidananda, el músico folk Richie Havens abrió el concierto con High Flyin' Bird. La lista de músicos y canciones que transcurrieron ininterrumpidamente durante esos 3 días es extensa y no viene al caso para los intereses de este blog; sin embargo, no me resisto a la tentación de evocar las intervenciones de Ravi Shankar (Raga Manj Kmahaj, Iap Jor...), Joan Baez (Oh Happy Day, Joe Hill, Sweet Sunny South...),Janis Joplin (Piece of My Hearth, Ball and Chain...), The Who (I'm Free, Tommy's Holiday Camp...), Jefferson Airplane (The Other Side of This Life, Uncle Sam's Blues...), Carlos Santana (Soul Sacrifice, You Just Don't Care...), Joe Cocker (With a Little Help from My Friends, Let's Go Get Stoned...), Johnny Winter (Leland Mississippi Blues/Rock Me Baby, Mean Town Blues...) y Jimi Hendrix (Jam Back At The House, Gypsy Woman...) quien clausuró el concierto con una tocata de 18 canciones durante 2 horas.
De todo ese derroche de música, sexo y ácido lisérgico en sicodélica libertad sólo se puede expresar exclamaciones de admiración y asombro. ¡Fue un momento único y maravilloso! PERO, si miramos la edad actual de aquellos jóvenes hippies "anarcosos y libertarios", tenemos que admitir que hoy (como actores directos, o como padres de la generación yuppie) están instalados en las esferas del poder reforzando todas esas conductas represivas que creían subvertir. Dado que ese simulacro de emancipación aconteció a un año y 3 meses del épico mayo del 68, es interesante hacernos algunas preguntas: ¿En qué creían los padres de los invasores a Irak?, ¿Dónde estaban los Bush, padre e hijos? ¿Y los dictadorzuelos latinoamericanos? ¿Qué pasó con la función social en la letra de las canciones?... Definitivamente Woodstock 1969, como espectáculo masivo, constituye un momento imprescindible en la historia de los conciertos; pero, como iniciativa social con función concientizadora ha sufrido la implacable golpiza de las contradicciones humanas.
PD. Hoy, 13 de agosto, en una jugada maestra del Arcan
o, Les Paul el creador de las Gibson decidió, a sus 94 años, irse con su música a otra parte. Rock en su tumba.