jueves, 24 de junio de 2010

Edith Shain- El inapreciable valor de ser besados

Ayer, 23 de junio de este año, que no es de gracia, la enfermera Edith Shain sucumbió al peso de sus 91 años, pese a que fue una mujer afortunada que supo lucir con gracia e inteligencia su generosidad de cuerpo, espíritu y mente, en una época en la que, al parecer, el falso moralismo y la hipocresía estaban menos exacerbados que en nuestro engañosamente "moderno" siglo 21. Edith fue la enfermera a quien un marinero anonimo propinó el beso que registró en su cámara el fotográfo Alfred Eisenstaedt el 14 de agosto de 1945 en Times Square (N.Y.). Treinta años después, Edith le escribió a Eisenstaedt para informarle  que aquella mujer de su retrato, publicada en la Revista Life, era ella que por ese entoncestrabajaba en el Doctor Hospital de Nueva York. La identidad del marinero aún hoy es desconocida. Para su fortuna, aquel beso la convirtió en invitada a numerosos eventos de homenaje a las Fuerzas Armadas y a los soldados caídos en combate. A su memoria, un fragmento de Piedra de Sol de Don Octavio Paz.
  ...el mundo nace cuando dos se besan,
gota de luz de entrañas transparentes
el cuarto como un fruto se entreabre
o estalla como un astro taciturno
y las leyes comidas de ratones,
las rejas de los bancos y las cárceles,
las rejas de papel, las alambradas,
los timbres y las púas y los pinchos,
el sermón monocorde de las armas,
el escorpión meloso y con bonete,
el tigre con chistera, presidente
del Club Vegetariano y la Cruz Roja,
el burro pedagogo,el cocodrilo
metido a redentor, padre de pueblos,
el Jefe, el tiburón,el arquitecto
del porvenir, el cerdo uniformado,
el hijo predilecto de la iglesia
que se lava la negra dentadura
con el agua bendita y toma clases
de inglés y democracia, las paredes
invisibles, las máscaras podridas
que dividen al hombre de los hombres,
al hombre de sí mismo,
se derrumban
por un instante inmenso y vislumbramos
nuestra unidad perdida, el desamparo
que es ser hombres, la gloria que es ser hombres
y compartir el pan, el sol, la muerte,
el olvidado asombro de estar vivos;
amar es combatir, si dos se besan
el mundo cambia, encarnan los deseos,
el pensamiento encarna, brotan alas
en las espaldas del esclavo, el mundo
es real y tangible, el vino es vino,
el pan vuelve a saber, el agua es agua,
amar es combatir, es abrir puertas,
dejar de ser fantasma con un número
a perpetua cadena condenado
por un amor sin rostro;
el mundo cambia
si dos se miran y se reconocen...