Pues...siii... La necesidad de supervivencia obliga a despertar saberes invaluables que muchas veces escondemos por temor a factores externos. Y, que paradoja, a veces esos factores externos son los que nos ayudan a desplegarlos para el asombro y maravilla de quienes, hasta llegado el momento, nos juzgaban por nuestra imágen social y despreciaban nuestras capacidades. Cuando sucede una vez... bueno, es un "milagro"; Si el milagro se repite, es un "fenómeno"... pero, ¿una tercera vez? Algo maravilloso se está gestando. Es lo que gritan a voz en cuello el mendigo de New York que quería aprender karate, el perrito de la carrera Séptima de Bogotá que se disfrazó de Rey Mago, Paul Potts, Susan Boyle y Ted Williams (el que me motivó este cuasi telenovelón) Tal vez tengan razón aquellos hippies con complejo de druida que pregonaban el advenimiento de una era del conocimiento, enrollada como un vareto (porro) en la Era de Acuario... Y, digo yo, quizá comprendamos que la única vía para el verdadero conocimiento es el sentimiento. Compruébelo Usted: Mírese estos videos con calma; déjese hidratar las pupilas y masajear el cardio. Este es mi regalo de Reyes. A ver si este año si descubrimos nuestra auténtica BELLEZA debajo de este mísero cascarón.
Yo tu belleza debajo del cascarón la descubrí hace rato, pero cada día me deslumbra más.
ResponderEliminarRodaron lagrimitas como era de esperarse, con estas 3 historias de sueños que se cumplen, de esperanza, tesón, voluntad. Ese es el regalo más importante con ellos podemos mover el mundo, o por lo menos la pequeña porción que nos toca.
Precioso obsequio de Reyes.
Muchos besitos y besazos para ti Hermoso!!
Gracias Melodía. En cambio, tú te fregaste, porque NO tienes cascarón: Eres como te intuimos (es que es imposible mirarte sin gafas oscuras)
ResponderEliminar¡Hola Dorian! por aquí trinando de nuevo en tu ventana, y sonriendo porque intentas dar un picotazo de positivismo a nuestras vidas descreídas y conformistas.
ResponderEliminarPero es cierto, hay auténticos tesoros a nuestro alrededor, el problema es que nos ponemos gafas oscuras y lo peor es que los que gobiernan el mundo están ciegos de codicia.
Un abrazo amigo
P.D. Si puedes me gustaria leer tu opinión sobre mi último escrito eres muy objetivo.
¡Pajarito! Que bueno contar con tus twittazos. Ah... La Esperanza es una vieja loca, calva, langaruta, bizca y pegajoza que sólo nos deja en paz cuando nos la desaloja Fortuna, su regordeta, retardada y voluble hijastra. Con tus escritos, ser "objetivo" es ser obvio: Tienes una escritura absolutamente moderna en los ritmos, las ideas y el lenguaje. Trinos desgañitados con aleteos febriles.
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